A través de los años se han realizado importantes mejoras y reformas.

Así, sabemos de forma documentada que en 1614 se realizó una importante reparación dirigida por el que fue el Maestro Mayor de la Catedral de Sevilla, Pedro Díaz de Palacios y ejecutada por los maestros carpinteros malagueños Bartolomé de Alcántara, carpintero ensamblador, Diego Jiménez Sarria, que fue alcalde en su oficio y Diego Jiménez Carrasco, según recoge la escritura firmada el 24 de mayo de 1614.

Se realizaron obras de albañilería y carpintería en las armaduras laterales, en puertas, ventanas, etc., así como reparación en los tejados de la Iglesia y Sacristía.

Posteriormente, en 1721 , se realizaron otras importantes obras en la solería y zonas afines, la penúltima reforma también se dirigió a la mejora de la solería.